lunes, 8 de febrero de 2010

Parece mentira, Dios mío!

Ya estamos en Carnavales. Desde pasadas las Navidades están con el escenario, que todo el mundo se preguntaba que qué era esa construcción en el parque... ¡Pues el Carnaval!.

Y es que el canario que se precia, tiene tres fiestas al año de mucho guardar: la Virgen del Pino, la Candelaria y el Carnaval.

¡Y qué barbaridad!. Las murgas salen como de la nada, y se ponen a cantar con sus cuchufletas y sus pitos, bombos y platillos, sus mascaritas, sus.....

Pero si aún tengo atragantado el turrón!!

Y qué decir de los voladores. ¡Qué pasada!. Se diría que el puerto de la ciudad vuelve a estar en llamas, o que nos están conquistando a cañonazos desde la bahía. Pero es una lucha incruhenta ésta, que sólo afecta a los oídos, los nervios y algún que otro cristal que salta ante una explosión "como por casualidad".

El festival de los carnavales canarios es el tercero del mundo. Sólo Brasil y Venezia compiten con él en suntuosidad, popularidad, y alegría. Estamos orgullosos de nuestro carnaval.....

¿Carnaval?. ¡Pues vamos a hacer de mascaritas!

¿Ustedes han visto qué barapalo le han dado a nuestro Presidente del Gobierno en la Cumbre de Jefes de Estado de la Unión Europea? Al parecer vamos a la cola de Europa en cuanto a progreso económico, ya que en España se aplicaron hasta tres años mas tarde las medidas anti-crisis que en los países mas avanzados de Europa. Es por esta razón por la que Inglaterra, Alemania, Francia o Italia manifiestan signos de franca recuperación frente a la crisis.
Nosotros, no.

¡País!

¿Saben que la Presidenta de una Comunidad Autonómica -¡LA PRESIDENTA!- declara que otro lider de su propio partido es un "hijo de p....", y se le olvida antes de hacerlo cerrar el micrófono durante un acto del partido? ¿Ese es el talante de nuestros políticos? ¿Esa es nuestra clase dirigente?

¿Y la educación, y el compañerismo, y las buenas formas, y la femenidad?

¡País!

¿Saben ustedes que pretenden -y sin duda lograrán- subir la edad de jubilación de los 65 a los 67 años, y reclacular las pensiones de modo que nos quede MENOS a los que TRABAJAMOS MAS?

¿Y este es un gobierno del pueblo y para el pueblo?

¡País!

Y perdonen que no le pongamos música. Es que sinceramente lo único que se nos apetece oir con esta sarta de noticias extraídas de los diarios de la última semana es una marcha bien fúnebre.
Y una careta de tragedia.

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